Si no apuestas, no ganas.

Dices que no sientes nada por él, que no te importa. Pero sabes que no es así. Lo que te pasa es que tienes miedo. Miedo a querer de verdad. Miedo a que te quieran. Y mucho, muchísimo, miedo a perderlo. Pero dicen que si no apuestas, no ganas. Lo que también te da muchisimo miedo es que acabe mal y que dejeis de ser lo que habeis sido hasta ahora. Por nada del mundo quieres llorar por su culpa, pero ¿sabes que? Es el riesgo que corres. Si, riesgo. Te arriesgas a empezar a medias y acabar queriendole de verdad. Enamorada. ¿Sabes? También puedes llegar a enamorarte de él. Y si eso pasa, probablemente, llores mas de una vez por él. Pero ¿vas a ser más feliz si no lo intentas? Alomejor es cierto eso que alguien dijo una vez: si, que volando demasiado alto te arriesgas ha hacerte daño cayendo..puede ser.. pero por eso que has visto mientras estabas allí vale la pena todo el dolor que has recibido cuando has caido.